El primer Volkswagen con motor refrigerado por agua y tracción delantera -

En una conferencia de prensa celebrada en Salzgitter el 20 de octubre de 1970, Volkswagen presentó el nuevo K 70 y la planta construida especialmente para la producción de este modelo. “Un Volkswagen nuevo, diferente a todos los demás fabricados hasta la fecha, el VW K 70”, decía la carpeta de prensa. De hecho, el sedán notchback abrió nuevos caminos en muchos aspectos. Con este nuevo modelo, Volkswagen estaba en el umbral de una nueva era exitosa.

Tecnología. Con el motor refrigerado por agua y la tracción delantera del K70, Volkswagen logró un cambio a un concepto de manejo que era completamente nuevo para la marca y que luego alcanzaría el éxito con el Passat y el Golf. El K70 tenía un chasis de última generación con suspensión independiente. La distancia entre ejes extraordinariamente larga permitió un interior especialmente espacioso y proporcionó muy buen manejo.

La seguridad. A pesar de toda la comodidad del K70, uno de los principales énfasis fue la seguridad activa y pasiva. Características como un habitáculo reforzado, zonas de deformación en la parte delantera y trasera, un depósito de combustible en la parte trasera en el área protegida y la preparación para los cinturones de seguridad en todos los asientos como característica estándar establecen nuevos estándares.

Diseño. El diseño ordenado con sus líneas claras, que sigue siendo atractivo hoy en día, demostró ser innovador. El sedán notchback fue diseñado por Claus Luthe, uno de los principales diseñadores de automóviles de su época. Su firma de diseño también es evidente en modelos Volkswagen posteriores, como el Golf y el Polo.

Karl-Günter Queißer, convencido desde el principio , es un testigo ocular que experimentó el K70 y la agitación en Volkswagen desde el principio. El hombre de 79 años comenzó su carrera en Volkswagen en 1970 como pintor de vehículos en la nueva planta de Salzgitter. Todavía recuerda muy bien los primeros años, una época de agitación y transformación. “Eso fue realmente algo muy especial”, dice, recordando la era del K70.

Pronto quedó convencido por el automóvil con su motor delantero refrigerado por agua, cuatro puertas y su interior y maletero sensacionalmente espaciosos. Ya compró su primer K70 en 1971. Hasta entonces, había conducido un Sedán y el cambio fue un salto cualitativo. Después de haber conducido tres K70, apareció un Golf en su garaje. “Las cosas siguen moviéndose”, dice el hombre que generalmente da la bienvenida al cambio y disfruta de la experiencia.

De la K70 al ID.3. Actualmente conduce una K70 LS y un Golf 8. Con la compra del K 70 ha cumplido un sueño y participa regularmente en rallies y viajes organizados con su clásico. En septiembre, una excursión lo llevó a su antiguo lugar de trabajo en Salzgitter. Con su club de fans, realmente había querido celebrar el aniversario de la K70 con una gira y un evento especiales organizados. Lamentablemente, esto no fue posible en vista de la situación de este año.